sábado, 21 de enero de 2012

Me voy con los Leones.

Ahora que el Licey  le pasó lo que le pasó en Santiago, no es tiempo de lamentos, ni de vestirse de negro, hago maletas y me mudo para el Escogido, donde me esperan buenos amigos Rojos, quienes me han dicho, que desde que llegue, me tienen preparado mi uniforme y una enorme corneta.

Algunos aguiluchos me han señalado de forma burlona y hasta amenazante, que voy a llorar dos muertos, no les hago caso y mi movimiento hacia el fiero León, es inevitable.

Mi adhesión a los Escarlatas, es necesaria, obvia, y la decisión la tomé sin mayores conflictos sentimentales. No puedo distraerme, y ponerme analizar lo sucedido, sé que el dolor es grande, ya habrá tiempo para derramarles unas lágrimas al Glorioso.

Por eso a partir de las cinco de la tarde de hoy, estaré apoyando delirante y activamente a los Leones, mi causa será la de Moisés y Oberkfell.

Sé que de frente tendremos un rival que nunca se da por vencido, por eso no podemos descuidarnos.

Entonces a jugar béisbol y darles tablas a los amarillos.

             
          ESCOGIDO CAMPEON.