Hace unas horas acompañaba a mi amigo Amauris, a pagar el servicio de cable, allí un señor de treinta y tantos años dijo algunas palabras, y enseguida sin uno pretender ser un sabelotodo o un Juan Miguel Gómez, ese señor evidenció un desprecio y poco respeto hacia a las mujeres.
Hombres que han sido diseñados, construidos, adiestrados, para sentirse superiores y dueños de las mujeres, esa ha sido la historia, y aun así ellas se destacan, están hechas de un material especial que las hace mejores. La gran mayoría de ellas, no suele abandonar a sus hijos, a sus padres, no se van a beber una cerveza sabiendo que en sus mesas, no hay que comer. Viven en un eterno sacrificio, estudian, trabajan, cuidan, miman, se las arreglan para hacer múltiples tareas.
De verdad que para mi en la tierra no existe un ser como las mujeres, con esa capacidad de entrega, de amor, dadoras de vida, y si me voy a lo otro, cuando uno está en brazos de una mujer, no se piensa en la muerte ni en impertinentes cuentas por pagar.
Cada quien que se considere respetuoso de las mujeres, debe propiciarles un ambiente cómodo, no debe hacerse cómplice, ni justificar agresiones hacia ellas, cada quien debe influenciar para desbaratar esa idea, de muchos verdugos que piensan que la mujer es un objeto, una posesión. Cuando cerca de mi un joven o un adulto tiene un discurso machista hacia ellas, los refuto y trato de que entiendan que una mujer no puede ser maltratada ni humillada.
Ya he dicho antes que el asunto es complejo, hombres robotizados que ven a las damas como seres inferiores, hay que luchar día a día contra eso, se nos cría a nosotros los varones con preferencias, les imponen labores a las niñas, mientras que los niños se le patrocinan inconductas, por eso no es fácil deshacer esa construcción del macho.
Lo ideal sería que haya reales políticas de Estado, que aborden con responsabilidad el tema, pero eso todavía no llega, y cada quien que le duela lo que sufren nuestras mujeres, debe aportar de la manera que entienda para disminuir los niveles de violencia.
A propósito, hoy cumpleaños una súper mujer, mi Mamá.
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